Como muchos aficionados ya saben, la productora Amicus fue una competidora de la Hammer surgida en los años 60 y que desapareció en los 70 al ser incapaz de adaptarse a los nuevos tiempos. Los americanos Milton Subotsky y Max J. Rosenberg eran los productores que se encargaron de llevar las riendas de esta compañía, siendo Subotsky el responsable de que la compañía se especializara en hacer películas antológicas, aunque también produjeron películas de argumento único, como la que hoy comentamos: Refugio macabro (Asylum, Roy Ward Baker, 1972).
Vistas hoy día, las películas de terror de la Amicus parecen anticuadas y muy de la vieja escuela, pero lo cierto es que ya lo eran en el momento de su estreno. Subotsky insistía en mantener sus películas dentro del "buen gusto", lo que se traducía en ausencia de erotismo y muy poca sangre. Esto quedaba compensado por lo ingenioso de algunas de las historias presentadas y una buena selección de directores y actores para darles vida.
Asylum es el perfecto ejemplo de este estilo, aunque fue una de las últimas producciones que hizo la compañía. El guion se basaba en historias de Robert Bloch, fue dirigida por Roy Ward Baker, que ya había dirigido unas cuantas maravillas para la Hammer, y en el reparto nos encontramos a estupendos actores y actrices como Peter Cushing, Herbert Lom, Chalotte Rampling, Patrick Magee, Britt Ekland... Asylum es también uno de sus títulos más sutiles, y me refiero literalmente al título. Subotsky tenía la costumbre de titular las películas de la forma más extrema y llamativa posible (trad.: La casa que goteaba sangre, Y ahora empiezan los gritos, La casa de los horrores del doctor Terror), para que la gente supiese lo que iba a ver, en ocasiones en detrimento de la propia película y para desesperación de los directores.
Siendo como es una película que presenta distintas historias, el resultado final es algo irregular. Los títulos los he dejado en inglés porque no recuerdo como fueron traducidos al castellano, ya que la edición que yo tengo en DVD es la especial inglesa y hace demasiado tiempo que la vi por televisión para tener ningún recuerdo de su traducción.
Póster americano del film que sigue la línea elegante y discreta marcada por Subotsky |
La película arranca con el que será el hilo narrativo de todas las historias: el doctor Martin (Robert Powell) es un joven psiquiatra que llega a un manicomio para conseguir un trabajo. Allí, el doctor Rutherford (Magee) le pondrá una difícil prueba antes de obtener el trabajo: debe escuchar las historias de distintos pacientes y averiguar cuál de ellos era el anterior director. Este hilo se mezclará con el de la última historia y, aunque el final es algo predecible (especialmente si has leído a Poe), es una forma entretenida de unir todas las historias.
Frozen Fear: La primera historia nos presenta la típica confabulación entre marido y amante con venganza desde el más allá, muy al estilo EC. Regular, la última parte es bastante entretenida.
The Weird Tailor: Es para mí la historia más floja de todas y es una lástima ya que cuenta con la presencia de Peter Cushing, que interpreta a un misterioso hombre que le hace un encargo bastante extraño a un sastre en apuros (Barry Morse). Sin muchas sorpresas, es algo lenta y no muy interesante.
Lucy Comes to Stay: En su momento debió ser una historia sorprendente pero el espectador actual debería ser capaz de predecir el final sin mucha dificultad. A pesar de ello, está muy bien hecha y resulta entretenida, gracias sobretodo a la presencia de la guapa Rampling que interpreta a una mujer convencida de que su hermano quiere matarla.
Manniquins of Horror: Como ya he dicho, esta historia se mezcla con el hilo conductor. Nos presenta al doctor Byron, un mad doctor que ha creado unos extraños maniquíes capaces de cometer terribles crímenes. Es la mejor historia de la película para mi gusto, me encanta ver como los muñequitos se van acercando a sus víctimas. Imagino también que puede resultar bastante ridícula si no os metéis en el espíritu del film.
Como ya he dicho, el resultado final es algo irregular pero no es óbice para que Asylum acabe siendo entretenida y disfrutable, principalmente para los aficionados al terror clásico. Esta es una película muy alejada del momento en que fue producida, lo que también le da cierto aire atemporal.
Esta la vi. A mí por lo general las pelis de la Amicus y la Hammer me atraen, tienen un algo fascinante, muy entretenidas. Las historias de Refugio macabro son un tanto rocambolescas, pero, como dices, si te metes en su espíritu las puedes disfrutar mucho. La vi hace cosa de 2-3 años. Creo recordar la escena de esas partes del cuerpo empaquetadas ;-D que querían acabar con uno de los personajes, ¿no era así? El final a mí no me pareció tan predecible… sólo casi hasta el último momento que ya sí, ya ves que puede ir por ahí. Chula peli de género terror fantástico.
ResponderEliminarUn saludo. Buena entrada, Raül.
Me gustan los psiquiátricos y Robert Bloch... Psycho!!!!
ResponderEliminarJavi, yo es que ya había leído un relato de Edgar Allan Poe que es muy parecido, por eso se me hizo predecible. Yo recuerdo que la vi por la tele de (más) joven y me gustó, aunque cuando la volví a ver, cuando compré un pack de Amicus hace no sé cuánto, me pareció simpática pero no me causó el mismo impacto de entonces.
ResponderEliminarPatricia, pues Psycho tiene mucho que ver con una de las historias, la Lucy Comes to Stay.