Hoy llegamos al 11 en delirio con la demencial The Seventh Curse (Yuen Chun Hap yu Wai See Lee, Ngai Choi Lam, 1986), una imposible mezcla de géneros y tonos que no parece real, sino un extraño sueño enfebrecido.
El film arranca con la presentación de Ni Kuang, que según me cuenta internet es realmente el autor de la serie de novelas de aventuras pulp en que se basa la película, en una fiesta donde presenta al doctor Yuen (Siu-Ho Chin) y a su amigo Wisely (Yun-Fat Chow). A partir de aquí se nos empieza a explicar una de las aventuras del doctor Yuen. Entonces empieza el alucinante viaje que es The Seventh Curse. El argumento parece bastante normal: el doctor Yuen recibe la maldición de las siete sangres, que inevitablemente le matará. El doctor Yuen, acompañado de Wisely, Black Dragon (Dick Wei) y la periodista Tsai-Hung (Maggie Chun) intentarán acabar con el malvado brujo Aquala (Elvis Tsui) para eliminar la maldición.
Lo que hace esta película tan memorable son sus contínuos giros y sorpresas. El film empieza con una secuencia típica del cine de acción asiático, con el doctor Yuen ayudando a acabar con unos terroristas en un hospital. Luego sigue con unas escenas que parece propias de una comedia de enredos. De ahí salta al cine de aventuras más pulp para meternos de lleno en la lucha contra Aquala. Una lucha salpicada de momentos eróticos gratuitos y sangrientas escenas. La más sangrienta y bestia sin duda es cuando introducen a dos niños en una prensa para aplastarlos, sus restos añadidos a una piscina de sangre que el malvado brujo usa para crear un monstruo que está a sus órdenes. Al parecer, la sangre de 100 niños es usada para crear este monstruo según saben nuestros héroes ANTES de que el brujo los mate. Sin embargo, los protagonistas tienen claras sus prioridades: en lugar de salvar a los niños se centran en rescatar a sus respectivas chicas.
Decir que The Seventh Curse tiene un ritmo frenético es como decir que la música en una disco está un poco alta. Hay escenas que parecen rodadas a cámara rápida, para que la siguiente locura ocurra lo antes posible ante nuestros cada vez más asombrados ojos. Lo cual alimenta el surrealismo que emana del film, en particular cuando surgen las criaturas fantásticas que ayudan al villano Aquala. Criaturas capaces de provocar unas carcajadas tan bestias que pueden desencajar la mandíbula del espectador.
The Seventh Curse es toda una experiencia. Frenética y absurda, con grandes escenas de acción y momentos que tendrás que ver dos veces para asegurarte de que realmente has visto lo que crees que has visto.
Pues me han entrado unas ganas locas de ver esta experiencia.
ResponderEliminarUn saludo
Ya no serás el mismo después de verla, :D
ResponderEliminarHe leido tu blog y me interesan estas peliculas de cine B pero no sé donde conseguirlas :(
ResponderEliminarYo las consigo por Amazon, DIabolik, comprando directamente a las distribuidoras. Como último recurso, explorar por la web con paciencia.
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