No tengo HBO así que he tenido que esperar hasta que se ha editado en Blu-ray y, entonces, buscar un hueco para poder ver una película que dura cuatro hora pero, tras mucho tiempo esperando, por fin he podido ver La liga de la justicia de Zack Snyder (Zack Snyder's Justice League, Zack Snyder, 2021). Obviamente, tenía curiosidad por ver cómo se había concebido originalmente La liga de la justicia antes de que cayera en manos de la Warner y Joss Whedon. Si bien, tras haberla visto, queda claro que es una versión que nunca se habría estrenado en cines aunque Snyder no se hubiese visto obligado a retirarse de la producción debido a una terrible desgracia personal.
He de admitir que me lo pasé bastante bien con la versión estrenada en cines. Me sorprendió su corta duración, me recordó al cine de superhéroes de los 90: una historia simple sin ningún intento de profundizar, y, además, me creí las informaciones que decían que se habían hecho cambios mínimos porque cuando Snyder abandonó el proyecto se encontraba en posproducción. El argumento de ambas es el mismo, pero mientras que la versión de Whedon es solo la historia, en su versión Snyder enriquecede el argumento añadiendo personajes, expande la historia para que sea más épica y desarrolla más profundamente aquellos personajes que no habían contado todavía con una película propia. Muchas escenas de acción se repiten, pero rodadas de forma diferente, con diferente montaje, diferentes ángulos y diferente tono. Ahora no voy a fingir que la película de Whedon no me gustó, pero queda claro que esta es la versión superior.
Pero, como ya he dicho, esta no es la versión que se hubiera estrenado en cines. Para empezar, la excesiva duración. Warner habría exigido una duración menor, un máximo de 150 minutos seguramente, para poder tener más pases en cada sesión. También habría exigido que fuera calificada para mayores de 13 años y un ancho de pantalla más acorde con las pantallas modernas. Una serie de cambios que habrían provocado que la recepción de La liga de la justicia de Zack Snyder no hubiese sido muy distinta de la fría recepción que tuvieron sus dos anteriores películas dentro del universo DC, por muy vocales que sean los fans más fanáticos de Snyder.
Creo que el universo DC según Zack Snyder estaba destinado al fracaso desde el prinicipio. Más que nada porque no era un universo. Marvel empleó 23 películas en contar la historia de la guerra de las gemas. Se fueron presentando personajes, estableciendo relaciones y todo un universo. Los cineastas al cargo del universo DC parecían tener prisa, lo que se tradujo en películas demasiado largas y sobreargumentadas. La razón por la que La liga de la justicia de Zack Snyder dura cuatro horas es que emplea mucho tiempo desarrollando personajes que merecían su propia película. ¿Por qué no seguir el estilo Marvel? ¿Por qué no establecer cada personaje con su propia película y luego reunirlos en un solo film? Intuyo que la razón fue que era precisamente lo que había hecho ya Marvel y que Zack Snyder no estaba interesado en crear un universo sino en contar las historias que quería contar, terminando su proyecto en una épica distópica que habría implicado que en algún momento Flash viajara al pasado para arreglarlo, como ya ha sucedido en distintas ocasiones.
Me gustan las películas de Zack Snyder, pero su enfoque de Superman y del universo DC no me acabó nunca de convencer (y Ejército de los muertos [Army of the Dead, 2021] fue una decepción). Así que, mientras su versión de La liga de la justicia me ha gustado mucho, en cierto modo me alegro que el universo DC haya quedado abierto a otras voces.