Somos tal para cual, tú y yo. Somos dos ovejas negras. Astutos y egoístas pero capaces de llamar a las cosas por su nombre.
Clark Gable a Vivien Leigh en Lo que el viento se llevó.
La monumental y fantástica épica Lo que el viento se llevó (Gone with the Wind, Victor Fleming (y los despedidos George Cukor y Sam Wood), 1939) está llena de grandes momentos y escenas inolvidables. Una de las que más me impresionó desde la primera vez que la vi es cuando Scarlett O'Hara (Vivien Leigh) va en busca de un médico para Melanie (Olivia de Havilland), mientras Atlanta está asediada por el ejército yanqui, y llega a una zona en la cual la cámara se empieza a elevar y van apareciendo hileras y más hileras de muertos y heridos hasta donde alcanza la vista.
Muchos de los aciertos visuales de este film se deben al diseñador de producción William Cameron Menzies, cuyo inimitable y onírico estilo se hace patente en varias escenas. Sólo hay que hacer una comparación con la película que dirigió Menzies, el clásico Invasores de Marte (Invaders from Mars, 1953), para ver las similitudes.
Pero el recuerdo más vivo de la película lo deja la pareja protagonista: Scarlett O'Hara y Rhett Butler (Clark Gable). Lo que me llama la atención es que no son dos personajes a los cuales uno llamaría heroícos. Butler, tal vez, sí tiene un punto de héroe perdedor, como ejemplifica uniéndose al ejército sabiendo que está todo perdido. Scarlett, sin embargo, es egoísta, hipócrita, mentirosa, astuta, manipuladora, caprichosa, tozuda... Pero, a pesar de todo, uno no puede más que sentirse atraído por ella y ponerse de su parte.
Puede que sea por la tozuda determinación en que salva a su familia y Tara sin dudar en matar y hacer lo que haga falta, puede que sea por la manera en que no teme enfrentarse a la sociedad entera que la rodea para conseguir lo que quiere. Exactamente, ¿dónde radica su atractivo? ¿Será esa "pasión por la vida" que menciona el timorato Ahsley Wilkes (Leslie Howard)?
Sea como sea, Scarlett O'Hara es la primera auténtica antiheroína del cine, creada en una época donde eran raros los personajes femeninos interesantes (la mayoría, o santas o putas), menos aún grandes heroínas. De hecho, el concepto de antihéroe tampoco es que estuviese desarrollado mucho en aquella época, reservándose en gran parte a los protagonistas masculinos de las películas de gánsteres de la Warner.
Personaje central de una de las mayores y mejores películas de la historia del cine, Scarlett parece apelar a nuestra parte más salvaje y rebelde. A Scarlett nadie se le cuela en la cola de la compra. A Scarlett nadie se atreve a despedirla. A Scarlett nadie se atreve a dejarla plantada. Scarlett, en definitiva, se labra su propio destino.
Como si fuera una especie de proto-punk, a Scarlett le traen sin cuidado las convenciones sociales y hace lo que quiere, cuando quiere. ¿Es esta característica, esta valentía, lo que la convierte en un personaje tan atractivo y memorable?
No lo sé, pero, como dice Rhett Bulter, qué mujer.
A pesar de que todo el mundo considera a Scarlett una anti-heroína, yo no lo tengo tan claro. De todas formas, es que tampoco tengo muy claro qué es un anti-héroe. O mejor dicho, no creo que todo el mundo defina un anti-héroe de la misma forma. Para mí, un anti-héroe tiene los mismos fines que un héroe pero sus medios son moralmente reprochables, por así decirlo. Y dentro de esta definición para mí es incompatible Scarlett porque tiene una cualidad que yo creo que no puede tener un héroe ni un anti-héroe: el egoísmo. Scarlett es una niña caprichosa y profundamente egoísta y aunque su personaje evoluciona durante la película, la última escena demuestra que sigue siendo una egoísta. No, no creo que sea una anti-heroína, más bien la veo como una mujer con carácter que utiliza cualquier medio para conseguir lo que quiere. ¿Cuándo hace Scarlett algo pensando únicamente en los demás? Nunca hace nada por pura bondad o porque piense que realmente debe hacer lo correcto sino que siempre tiene un interés oculto. Yo no creo que eso sea un anti-héroe.
ResponderEliminarBueno, Einer, como tu dices depende de lo que te parezca un antihéroe. Scarlett es una antiheroína de la misma forma que lo es Riddick, personajes que actúan por interés propio y en el proceso consiguen otros fines llamados "heroicos", en el caso de Scarlett salvar a toda su familia de la pobreza y el hambre o traer al mundo al hijo de Melanie; en el caso de Riddick salvar unas personas cuando su único objetivo es salvarse a si mismo.
ResponderEliminarTambién se pueden considerar antihéroes los detectives duros y perdedores del cine negro o los mafiosos como Tony Montana.
Luego tenemos los últimos hombres nobles, al estilo Snake Plissken, héroes que viven en una sociedad que los convierte en antihéroes; o justicieros psicópatas como El castigador.
Para mí Scarlett es una antiheroína porque es el centro de la película, es la protagonista de los eventos que suceden o se cuentan desde su punto de vista, pero tiene unas cualidades morales y motivaciones que no se consideran propias de una heroína (Melanie lo sería si fuera ella la protagonista de la película), aunque su motivación principal es el amor imposible que siente por Ashley Wilkes y la desgracia que le trae, tiene cualidades y momentos que la redimen en parte y tampoco es una villana, a pesar de todo.
Pero, volviendo al principio, tal vez dependa de lo que se entienda por antihéroe. Para mí, lo es.
Lo que hace es heroico, entonces sí que se le podría llamar heroína en ese sentido; pero como todo héroe, también tiene sus imperfecciones, y ahí tal vez no encaje mucho en el papel de heroína y sí en el de antiheroína.
ResponderEliminarBuena entrada, Raül
PD: A mí esta peli me gusta lo justo. Tiene momentos, pero en general no es una película que me entusiasme, ni mucho menos.
Javi, precisamente lo que yo digo es que resulta curiosa una película cuya protagonista tiene los rasgos y atributos típicos de los villanos de la época pero aquí se la convierte en la protagonista, de ahí el origen, entre otras cosas, de considerarla la primera antiheroína.
ResponderEliminarSin menos preciar a Scarlett y mucho menos a Vivien Leigh un año antes nos podemos encontrar con otra antiheroína perfecta que ha sido en parte tapada por la sombra de la señorita O'Hara y es la Julie Marsden de "Jezabel" (William Wyler, 1938) interpretada por la sin par e inolvidable Bette Davis!!!
ResponderEliminarTienes razón, Bertoff, que Julie Marsden apareció antes, pero es más un caso de "espíritu libre" en una sociedad conservadora que una antiheroína, ya que Jezabel es más un drama romántico que una épica kitsch y desmadrada como Lo que el viento se llevó, y no creo que tenga el mismo estatus mítico. Pero, bueno, todo el mundo tiene su opinión igual que tiene... pues, ya sabes, eso.
ResponderEliminarEscarlata es caprichosa pero no la considero del todo egoísta cuando vemos la famosa escena en la que jura que no volverá a pasar hambre dice ni yo ni ninguno de los míos, el problema de Escarlata es que cree estar enamorada de Ashley y no valora lo que tiene delante se da cuenta de sus errores cuando es demasiado tarde aunque incluso cuando acaba sola no se rinde lo que la convierte en un personaje único.
ResponderEliminarEs que esa escena es cuando Escarlata ya ha pasado por los horrores de la guerra y eso la ha cambiado, pero luego sigue teniendo sus ramalazos egoístas.
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