10 oct 2012

El mutilador (The Mutilator)


¿Es acaso El mutilador (The Mutilator, Buddy Cooper, 1984) un serio drama intimista? ¿O un complejo estudio sobre la naturaleza humana? Nop. ¡Es un slasher! ¡De los 80! ¡Yeah, baby, yeah!

Esta película vio la luz en la fiebre slasher de los 80 precisamente porque había una fiebre slasher en los 80. Si miráis en IMDB, veréis que este es el único crédito como director de Buddy Cooper, también guionista y productor del film, y eso es porque Cooper era un abogado (supongo que todavía lo es) que siempre había soñado con hacer una película, no alguien que quisiera hacer carrera con el cine. En aquel entonces, mediados de los 80, se hacían montones de películas de terror, ya que con su bajo presupuesto y su gran popularidad era casi seguro que daban beneficios. Así que Cooper decidió hacer una película de terror porque pensó que sería más fácil recuperar el dinero (según cuenta en esta entrevista). Paseando por la playa con un amigo, decidió hacer un film de terror en el cual el asesino utilizase herramientas usadas para cazar y pescar. El propio Cooper se financió la película y, con la ayuda de John Douglass (que aparece acreditado como codirector) en la reescritura del guion ( Douglass enseñaba escritura de guiones en una universidad), se puso manos a la obra para hacer realidad su sueño de dirigir una película.

Se estrenó en cines como Fall Break, pero cambiaron el título al comercializarla en vídeo.
Uno podría pensar que contando con un director amateur y un reparto de actores no profesionales (exceptuando Ben Moore, el cual había aparecido también en la clásica 2000 maníacos [Two Thousand Maniacs!, Herschell Gordon Lewis, 1964]), el resultado final sería un desastroso film de terror. Y es cierto que el film no está a la altura de otros grandes ejemplos del género como La quema (The Burning, Tony Maylam, 1981) o El asesino de Rosemary (The Prowler, Joseph Zito, 1981), pero es mejor que otros títulos infumables como Home Sweet Home (Nettie Peña, 1981).

En otras palabras, The Mutilator es un film regular que puede resultar bastante entretenido para los aficionados al género. La dirección de Cooper es regular, imitadora del estilo que mostraban otros títulos en el cine en aquel momento, y el guion es predecible. Pero, a pesar de no ser profesionales, los actores están bastante bien, no son creaciones tridimensionales con las que enseguida te identificas, pero tampoco son personajes irritantes y odiosos que deseas ver muertos enseguida como parece ser la norma en muchos slashers.

Lo que resulta sobresaliente en este film son los efectos especiales de maquillaje, en su versión "unrated", muy sangrientos y efectivos. Incluso son mejores que los de algunos títulos "profesionales". Yo destacaría particularmente las tres muertes del tramo final.

The Mutilator es un típico slasher, en lo bueno y en lo malo, que puede que los fans de este subgénero encuentren sangrientamente disfrutable.


2 comentarios:

  1. Me llama la atención esa faceta amateur de Buddy Cooper. Está bien que haya gente emprendedora y con su ilusión. A veces en esos proyectos salen cosas que merecen mucho la pena, aunque también es cierto que si fuera verdaderamente bueno seguiría haciendo cine, algo que le debía gustar a esta tal Cooper.
    Un saludo, Raül.

    ResponderEliminar
  2. Supongo que pensó que ganaría más como abogado. Saludos.

    ResponderEliminar