Muchos lectores de los cómics protagonizados por Batman estarán de acuerdo en que hasta la llegada de las películas de Christopher Nolan, este personaje no había sido retratado con fidelidad en el cine. Anteriormente comenté la película de los 60 aquí y ahora me gustaría echarle un vistazo a las cuatro películas que se realizaron en la década de los noventa, por si el título del post no lo dejaba claro.
Batman (1989) de Tim Burton llegó en un momento en el cual las adaptaciones de cómics y los superhéroes no eran un género precisamente prestigioso. Desde el estreno de Superman (1978) de Richard Donner, el cine de superhéroes había caído en una progresiva decadencia y generaba productos infumables. Las series televisivas, como la que protagonizó Spiderman en los 70, eran puro camp y no ayudaban a que se tomara el género en serio.
Estando como estaba el panorama, no es de extrañar que la película de Tim Burton fuese un tremendo éxito de taquilla que generó una increíble batmanía. Para los que no la vivieron puede que sea algo difícil de entender, pero Batman estaba en todas partes. Rebuscando por casa he encontrado una ingente cantidad de merchandising de la época, cosas como chapas o una camiseta que regalaba la Coca-Cola, que entonces era negra y ahora es gris. Es curioso leer el correo de los lectores y las noticias que salieron en los tebeos de la época. He aquí dos fragmentos de cartas publicadas en el número 27 de la colección Batman que publicaba entonces ediciones Zinco:
"Estoy pasando el verano en Xabia (...) Bueno, el fenómeno es evidente. Por aquí lo llaman Batmanía. (...) Simbolitos del murciélago adornan pubs de la costa. Por la playa, grupos de jóvenes visten la camiseta con el círculo amarillo del murciélago. La música de Prince inunda literalmente cada local".
"Estoy algo sorprendido. Hasta la fecha, finales de julio -la película se estrenó en España en septiembre de 1989-, tengo ya contabilizados tres amplios artículos sobre la película (...) en revistas de cine y música, otro artículo en un periódico de gran tirada, cuatro espacios en emisoras de rádio (...), dos espacios en televisión (...) y, por supuesto, el estreno a bombo y platillo del videoclip del Batdance de Prince en el programa Rockopop".
Ahora no parece gran cosa, ya que estos fenómenos se producen cada verano con el gran estreno de la temporada, pero entonces era algo inédito comparable sólo al estreno de La guerra de las galaxias (Star Wars, George Lucas, 1977).
La primera vez que la vi en el cine de pequeño me pareció fabulosa, una obra maestra. Luego, en la edición especial en DVD, me pareció más regular, con algunos problemas de edición. Y viéndola en Blu-ray es un poco una mezcla de las dos reacciones. Las canciones de Prince me parecen infumables, lo son hasta para sus seguidores, aunque compensada por la excelente banda sonora de Danny Elfman y el guion resulta algo flojo y predecible, pero a pesar de ello resulta bastante entretenida. En retrospectiva, abundan las críticas respecto al hecho de que Burton creara una realidad alternativa alejada de los ambientes urbanos realistas por los que Batman se movía, creando una especie de época atemporal mezcla de cosas modernas y antiguas. Sin embargo, creo que teniendo en cuenta como era la moda de 1989, creo que la película sale ganando en ese aspecto y los que critican el diseño deben tener mala memoria (o ser un pelín horteras).
El resultado final resulta interesante en cuanto a diseño, pero la historia y los personajes resultan muy típicos y tópicos, algo habitual en el cine de Burton. Algunos de los problemas en términos de guion se solventaron en la siguiente entrega: Batman vuelve (Batman Returns, 1992).
Cuando vi Batman vuelve en el cine me dejó algo frío, pero con el tiempo ha aumentado mi apreciación hacia esta película. No obtuvo los mismos resultados de taquilla que la primera, aunque estuvo cerca, y la Catwoman y el Pingüino de la película no guardan ninguna relación con sus contrapartidas de los tebeos, aparte del nombre; pero resulta una película más interesante que la primera entrega, aunque tampoco destaque la acción, que parece ser no es el fuerte de Burton. Lo que sí es el fuerte de Burton son los toques góticos que se le añaden a la película, además de un reparto en plena forma.
El que debería haber sido el punto fuerte de la película, la relación entre Catwoman y Batman, pasa casi a un segundo plano centrándose en el Pingüino que encarnó con placer Danny DeVito. Más placentera para el espectador es Michelle Pfeiffer como Catwoman.
Ambas películas de Burton sufren de un mismo defecto: un conocimiento superficial del material en el que se basan. Los argumentos están cargados de tópicos que hacía tiempo los cómics habían abandonado, rescatando una narrativa propia de los años 30 y 40, sin tener en cuenta la evolución que había sufrido el personaje, algo que sí tuvieron en cuenta David Goyer y Christopher Nolan. Es tal vez esto lo que hace que, vistos hoy día, resulten filmes interesantes y bien realizados pero algo pasados de moda. Burton, como ya he dicho, no es un experto dirigiendo secuencias de acción, muy poco imaginativas si tenemos en cuenta el esfuerzo destinado a crear los decorados, lo cual les quita algo de brillantez a las películas, pero tienen detalles y escenas curiosas que acaban inclinando la balanza a su favor.
Por supuesto, ambas parecen obras maestras comparadas con las dos siguientes películas que se sumaron a la saga: Batman Forever (1995) y Batman y Robin (Batman and Robin, 1997), ambas dirigidas por Joel Schumacher.
Si cuando se estrenó Blade Runner (Ridley Scott, 1982) todo el mundo la puso a parir, menos cuatro gatos, y al cabo de unos años todo el mundo la considera una obra maestra y dice que ya lo dijeron en su momento, con Batman Forever pasó justo al revés: en el momento de su estreno fue un gran éxito y fue tremendamente popular, al cabo de unos años todo el mundo la considera un truño y una basura.
Es curioso, fue como un caso de locura colectiva. Ya comenté anteriormente que en su momento incluso me encontré con amigos que me insistían que la viese a pesar del mal rollo que me daba, que me decían que era muy buena. Posteriormente lo han negado o bajan la cabeza avergonzados al recordar su locura pasada.
Batman Forever parte del mismo defecto que las anteriores películas Batman: una visión superficial del material. En este caso, sus (ir)responsables se remontaron a la serie de los 60, llenando la pantalla de colores chillones y un diseño extremado. Al tono general de comedia y ridículo se le añadieron unos toques eróticos gay que acabaron de darle el toque de gracia a la película. Pero creo que lo peor sin duda fueron las interpretaciones(?) exageradas de Tommy Lee Jones y Jim Carrey.
Podríamos estar horas y horas hablando de lo terrible que es Batman Forever pero ¿para qué alargar la agonía? Lo cierto es que en su momento fue un gran éxito de taquilla y generó tal entusiasmo que el estudio le dio completa libertad a Schumacher para hacer lo que quisiera en la siguiente entrega: Batman y Robin.
Podéis leer el post que le dediqué a la última e infame entrega de la primera saga batmaniana aquí. Para no repetirme, simplemente añadir que es Batman Forever multiplicada por 10. El resultado es tan exageradamente hortera, kistch y ridículo que lo cierto es que me acabó gustando. Es decir, que me rio tanto de la película que me divierte bastante verla.
La conclusión final es: menos mal que llegó Nolan. También he de añadir que hace ya un tiempo que dejé de leer la serie regular de Batman, un poco por aburrimiento y otro poco porque han ido añadiendo tantos secundarios que ya no se trata de las aventuras de Batman sino de casi un ejército de vigilantes de la noche. Podéis encontrar un pack en Blu-ray con las cuatro películas al precio de lo que te cuesta una aquí en la rama británica de Amazon, la misma edición que se encuentra a la venta en España.
Recuerdo con mucho cariño la Batmania y las peliculas de Burton, pero han envejecido fatal.
ResponderEliminarEn cuanto a las otras dos, resultan lamentables las mires por donde las mires. Lo de Nolan ya es otra cosa, da gusto verlas y revisitarlas cada poco.
La cuestion es : seguiran gustandonos dentro de 10 años ? yo apuesto a que si.
Un saludo.
Yo nunca he leido la serie regular de batman, ya que esas tramas interminables me aburren. No obstante, Batman es uno de los pocos héroes de cómic que me gustan, y por tanto, en mi estantería dedicada al noveno arte no falta el Arkhan Assylum, Año Uno, la broma asesina, El largo halloween o El regreso del Caballero Oscuro. Es en estas novelas gráficas dónde, a mi parecer, se puede apreciar la calidad artística de este personaje.
ResponderEliminarRespecto a las películas, la primera de Tim Burton me parecia buena hasta que vi la de Nolan. No es que ahora me parezca mala, pero si muy, muy inferior. El punto fuerte de esa película y su secuela es la ambientación.
Sobre Batman Forever y Batman y Robin mejor no digo nada. Como bien dices, Raül, esas dos películas intentaron tomar el tono jocoso y chillón de la serie de los sesenta (infumable, por cierto), y pasó lo que pasó. Dos bodrios que nunca llegarán a nada.
Y las de Nolan.. ¿qué decir?. Me alegro mucho que empezara la franquicia desde cero. Batman se merecía ser llevado al cine como Dios manda.
Kin G. Haro, también recuerdo con cariño la batmanía aunque en entonces no era del todo consciente de lo único que era el fenómeno. Yo también creo que las películas de Nolan envejecerán bien, estoy impaciente por ver The Dark Knight Rises.
ResponderEliminarDr. Gonzo, la serie de los 60 me hace gracia ya que fue conscientemente hecha como una comedia surrealista, una parodia. Es decir, sus creadores sabían perfectamente lo que hacían, al contrario que los responsables de Batman Forever y Batman y Robin, que pensaban que estaban haciendo las películas tal y como eran los cómics. Y como digo, de vez en cuando me hace gracia ver Batman y Robin por lo monstruosamente mala que es.
Hola Raul,que tal? ya hacia tiempo que no pasaba`por aqui,y es que tuve el ordenador KO durante este mes y la verdad que tenia gnas de pasarme por el tuyo que nunca falta en mi revision de los blogs amigos.
ResponderEliminarEn lo referente al post,que repaso tan bueno de uno de mis super heroes con los que creci leyendo los comics.
Y te doy la razon que el patetismo del bodrio de "Batman Y Robin" es para dar de comer a parte.
Saludos y me alegra volver a leerte.
Hola de nuevo Atticus! La tecnología nos juega siempre malas pasadas. Yo también crecí con Batman, junto a Superlópez y Mortadelo y Filemón.
ResponderEliminarYo recuerdo ver la primera de Tim Burton y quedarme un poco igual, demasiado oscura. Aunque yo tampoco había leído los cómics y, por mi entorno, sé que a muchos fans del cómic sí les pareció una buena peli precisamente por ese entorno gótico oscuro que creó Burton. Las siguientes ya no me atreví a verlas XD
ResponderEliminarCon Christopher Nolan creo que se acercó todavía más la adaptación de figuras de cómic o superhéroes al gran público no lector, humanizándolas dentro de lo posible de una forma para mí muy acertada. Yo es que odio los cómics de superhéroes, jaja, así que no puedo ser muy objetiva tampoco. Aún así he de decir que lo poquito que he leído de Batman en cómic no me ha disgustado tanto como otras historietas del género. Y, por descontado, me encantan las pelis de Batman de Nolan :)
saluditos
Lillu te he de decir que a mi me gustan las películas de Nolan precisamente porque son las más fieles al cómic. También te digo que el género de superhéroes es como cualquier otro: no es que sea malo el género sino el producto que se hace dentro de él, y abunda mucho el exceso de tópicos, especialmente en las películas de superhéroes de Hollywood, que las llenan de clichés y dan mala imagen a los cómics, que también hay de todo.
ResponderEliminarBuenas Raül!!
ResponderEliminarA mi me apasiono Batman de Tim Burton, recuerdo que obligue a mis padres a que me llevaran 3 veces a verla al cine… tendría unos 6 o 7 años.
Conforme fui creciendo ivan saliendo secuelas de Batman que no sabría decirte cual es peor y que solo hacían que agrandar el mito de la primera de Burton.
Hasta que apareció el señor Nolan y decidió cambiar el rumbo de la saga regalándonos dos films increíbles que son todo un ejemplo de cómo hay que hacer cine de superhéroes.
Saludos!!
Saludos! Pero ya te digo que la 2ª de Burton me parece mejor que la 1ª
ResponderEliminarMe encanto el articulo. Mi opinión al respecto es que Christopher Nolan volvió a los orígenes del personaje pero tomó bastante prestado de Tim Burton (traje especial y pistola con gancho). Burton se fue por lo superficial (y de allí el mejor traje, estéticamente hablando, de Batman), sin embargo Nolan se fue por quien es Bruce Wayne e hizo finalmente una buena historia de Batman. Alguien finalmente aprendió de Richard Donner quien sabe que la acción no es nada si no conoces bien y te interesas en el protagonista.
ResponderEliminarYo diría que los gadgets ya aparecen en los cómics, por lo menos así era cuando los leía, no fue algo que inventara Burton. Pero es cierto que Donner fue un pionero.
ResponderEliminarMe aburren las de Nolan, son muy densas y no tienen fantasia.
ResponderEliminarNo sé si te refieres en concreto a sus pelis de Batman, pero Origen tiene bastante de fantasía.
ResponderEliminarA mi me gusta las dos de burton y la trilogía de Nolan, aunque Batman vuelve es mi favorita por la historia de amor y odio entre Batman y catwoman, para mi Michelle Pfeiffer la mejor Catwoman.
ResponderEliminarSí, Michelle Pfeiffer se convirtió en un icono como Catwoman y no creo que ninguna actriz logre ponerse a su altura en este sentido.
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