Muchos críticos y comentaristas se llenan la boca hablando de las diferentes etapas de David Cronenberg como cineasta. Como las últimas películas que ha estrenado no tienen nada que ver con las primeras que hizo.
Chorradas.
Si hay algo que caracteriza a Cronenberg es la constancia. A lo largo de todas sus películas ha ido tratando los mismos temas una y otra vez desde diferentes perspectivas (cosa que podéis comprobar en este blog, ya que he comentado todas sus películas -menos los mediometrajes Stereo y Crimes of the Future pero si me lo pedís también las comentaré- sólo tenéis que clicar "david cronenberg" en la columna Etiquetas). Un método peligroso (A Dangerous Method, 2011) no es una excepción, y en esta película podemos encontrar ecos de Crash (1996), Inseparables (Dead Ringers, 1988) e incluso de Vinieron de dentro de... (Shivers, 1975). Así como también en esta película encontramos muestras del seco y en ocasiones irónico sentido del humor que Cronenberg introduce en todos sus filmes.
La película parte originalmente de la obra de teatro de Christopher Hampton The Talking Cure. Cronenberg vio la obra e inmediatamente inició el proceso para convertirla en película. Hampton usa en el guion además de su propia obra, el libro de John Kerr La historia secreta del psicoanálisis (A Most Dangerous Method) y la investigación llevada a cabo por Cronenberg y Hampton. Hampton llegó incluso a viajar a Zúrich y visitar el hospital Burghölzli donde leyó el expediente como paciente de Sabina Speilrein mientras escribía el primer guion a mediados de los 80, el cual luego convirtió en la obra de teatro. Además, en la película se citan las cartas reales que intercambiaron Sigmund Freud, Carl Jung y Speilrein. Pero no hay que olvidar que esto es una película no un documental y hay obviamente elementos que pertenecen exclusivamente al campo de la ficción, así que evitad citar el film como si fuera todo real. Es algo que encuentro casi tan irritante como la gente que hace comentarios graciosos o irónicos en voz alta en el cine, estos directamente merecen ser torturados. Lentamente.
Una muestra de lo brillante que es la película es que a pesar de partir de diversos materiales, el guion es tremendamente sólido y absorbente. Destaca la caracterización de Freud (Viggo Mortensen) y Jung (Michael Fassbender), los psicoanalistas que reaccionan de manera fría y clínica incluso ante sus propias emociones, hablando de ellas como si estuviesen hablando de un jarrón particularmente interesante. Jung intenta a toda costa mantener las apariencias y en ocasiones actúa como si lo que le pasa le sucediera a otra persona, lo que acabará provocando su progresivo derrumbe emocional. Por contraste, los abiertamente neuróticos Speilrein (Keira Knightley, muy sexy con acento ruso) y el doctor Otto Gross (Vincent Cassel) parecen mucho más humanos y normales a pesar de su neurosis ya que muestran sus emociones de forma más abierta. Excesivamente abierta algunas veces, eso sí.
Una de las razones por las que Cronenberg es uno de mis directores favoritos, aparte de por lo interesante de las temáticas que trata, es su estilo a la hora de filmar una película. Mientras que la inmensa mayoría de directores hacen gala de sus influencias y abiertamente toman "préstamos" de otros filmes y autores (directores tan diferentes como Martin Scorsese, Francis Ford Coppola, John Carpenter o Sam Raimi lo hacen), con Cronenberg uno parece que sólo puede referirse al propio Cronenberg. Esto es así ya que tiene un estilo aparentemente sencillo, pero muy meditado, en el cual se busca la mejor manera de transmitir la historia. Por ejemplo, en Un método peligroso podemos ver como elimina el segundo plano. Es decir, utiliza una lente partida para que cuando hay un personaje en primer plano y otro en segundo, ambos estén enfocados. De este modo, en las escenas de psicoanálisis uno puede observar las reacciones tanto del doctor como del paciente, de manera que, a nuestros ojos, el doctor se encuentra bajo escrutinio igual que el paciente.
Un método peligroso es un film fascinante. No sólo por como muestra la evolución de una de las disciplinas más revolucionarias de la historia de la psicología, también por como nos descubre a Sabina Speilrein, la cual empezó como paciente y más tarde se convirtió ella misma en psicoanalista y una de las piezas clave en el desarrollo del psicoanálisis. Pero, especialmente, por el retrato que hace de unos personajes atrapados por sus propias pasiones y deseos. Es la complicada y neurótica relación entre Spielrein y Jung la que, para mi gusto, hace que esta sea una película interesante, dejando de lado que sean personajes históricos y la historia del psicoanálisis. Cronenberg muestra a sus personajes cometiendo estupideces y locuras no muy diferentes a las que nosotros mismos podríamos cometer llevados por la locura emocional. En el fondo, todos somos bastante neuróticos y, en ocasiones, estúpidos. No hace mucho, dos amigas (a las que llamaré Epa y Blasa) me hablaron entusiasmadas de la serie The Big Bang Theory, ya que Sheldon les recordaba a mí y me dijeron que tenía que verla, que era muy buena y muy divertida. Yo les había dicho que no la había visto, pero sólo para ahorrarme una discusión ya que de hecho sí que la había visto cuando se emitió la primera temporada, ya que otra amiga (a la que llamaré Gustava) me había dicho que era muy divertida; pero cuando la vi no me gustó y no me pareció particularmente divertida. Pero ya les había dicho a Epa y Blasa que no la había visto y ahora me preguntan "¿ya la has visto?" "¿ya la has visto?". Y yo digo que no, porque si ahora les digo la verdad, tal vez no me crean o crean que no me gustó por lo que dijeron de Sheldon, que en realidad me da bastante igual y simplemente no me gustó porque no me hizo gracia. ¿Veis? Un lío completamente estúpido y totalmente evitable que me podría haber ahorrado pero el neurótico que vive en mi cabeza me lo impidió.
En fin, la versión corta: Un método peligroso es una gran película, interesante, absorbente, sólido guion, magníficas interpretaciones por parte de todos los interpretes. Id a verla o no, como queráis, pero a mí me encantó.
La película parte originalmente de la obra de teatro de Christopher Hampton The Talking Cure. Cronenberg vio la obra e inmediatamente inició el proceso para convertirla en película. Hampton usa en el guion además de su propia obra, el libro de John Kerr La historia secreta del psicoanálisis (A Most Dangerous Method) y la investigación llevada a cabo por Cronenberg y Hampton. Hampton llegó incluso a viajar a Zúrich y visitar el hospital Burghölzli donde leyó el expediente como paciente de Sabina Speilrein mientras escribía el primer guion a mediados de los 80, el cual luego convirtió en la obra de teatro. Además, en la película se citan las cartas reales que intercambiaron Sigmund Freud, Carl Jung y Speilrein. Pero no hay que olvidar que esto es una película no un documental y hay obviamente elementos que pertenecen exclusivamente al campo de la ficción, así que evitad citar el film como si fuera todo real. Es algo que encuentro casi tan irritante como la gente que hace comentarios graciosos o irónicos en voz alta en el cine, estos directamente merecen ser torturados. Lentamente.
Una muestra de lo brillante que es la película es que a pesar de partir de diversos materiales, el guion es tremendamente sólido y absorbente. Destaca la caracterización de Freud (Viggo Mortensen) y Jung (Michael Fassbender), los psicoanalistas que reaccionan de manera fría y clínica incluso ante sus propias emociones, hablando de ellas como si estuviesen hablando de un jarrón particularmente interesante. Jung intenta a toda costa mantener las apariencias y en ocasiones actúa como si lo que le pasa le sucediera a otra persona, lo que acabará provocando su progresivo derrumbe emocional. Por contraste, los abiertamente neuróticos Speilrein (Keira Knightley, muy sexy con acento ruso) y el doctor Otto Gross (Vincent Cassel) parecen mucho más humanos y normales a pesar de su neurosis ya que muestran sus emociones de forma más abierta. Excesivamente abierta algunas veces, eso sí.
Una de las razones por las que Cronenberg es uno de mis directores favoritos, aparte de por lo interesante de las temáticas que trata, es su estilo a la hora de filmar una película. Mientras que la inmensa mayoría de directores hacen gala de sus influencias y abiertamente toman "préstamos" de otros filmes y autores (directores tan diferentes como Martin Scorsese, Francis Ford Coppola, John Carpenter o Sam Raimi lo hacen), con Cronenberg uno parece que sólo puede referirse al propio Cronenberg. Esto es así ya que tiene un estilo aparentemente sencillo, pero muy meditado, en el cual se busca la mejor manera de transmitir la historia. Por ejemplo, en Un método peligroso podemos ver como elimina el segundo plano. Es decir, utiliza una lente partida para que cuando hay un personaje en primer plano y otro en segundo, ambos estén enfocados. De este modo, en las escenas de psicoanálisis uno puede observar las reacciones tanto del doctor como del paciente, de manera que, a nuestros ojos, el doctor se encuentra bajo escrutinio igual que el paciente.
Un método peligroso es un film fascinante. No sólo por como muestra la evolución de una de las disciplinas más revolucionarias de la historia de la psicología, también por como nos descubre a Sabina Speilrein, la cual empezó como paciente y más tarde se convirtió ella misma en psicoanalista y una de las piezas clave en el desarrollo del psicoanálisis. Pero, especialmente, por el retrato que hace de unos personajes atrapados por sus propias pasiones y deseos. Es la complicada y neurótica relación entre Spielrein y Jung la que, para mi gusto, hace que esta sea una película interesante, dejando de lado que sean personajes históricos y la historia del psicoanálisis. Cronenberg muestra a sus personajes cometiendo estupideces y locuras no muy diferentes a las que nosotros mismos podríamos cometer llevados por la locura emocional. En el fondo, todos somos bastante neuróticos y, en ocasiones, estúpidos. No hace mucho, dos amigas (a las que llamaré Epa y Blasa) me hablaron entusiasmadas de la serie The Big Bang Theory, ya que Sheldon les recordaba a mí y me dijeron que tenía que verla, que era muy buena y muy divertida. Yo les había dicho que no la había visto, pero sólo para ahorrarme una discusión ya que de hecho sí que la había visto cuando se emitió la primera temporada, ya que otra amiga (a la que llamaré Gustava) me había dicho que era muy divertida; pero cuando la vi no me gustó y no me pareció particularmente divertida. Pero ya les había dicho a Epa y Blasa que no la había visto y ahora me preguntan "¿ya la has visto?" "¿ya la has visto?". Y yo digo que no, porque si ahora les digo la verdad, tal vez no me crean o crean que no me gustó por lo que dijeron de Sheldon, que en realidad me da bastante igual y simplemente no me gustó porque no me hizo gracia. ¿Veis? Un lío completamente estúpido y totalmente evitable que me podría haber ahorrado pero el neurótico que vive en mi cabeza me lo impidió.
En fin, la versión corta: Un método peligroso es una gran película, interesante, absorbente, sólido guion, magníficas interpretaciones por parte de todos los interpretes. Id a verla o no, como queráis, pero a mí me encantó.
7 comentarios:
otra película que tenía ganas de ver y al final no han estrenado en Antequera. Malditos garrulos...
En fin, tampoco me mosqueo mucho. A decir verdad, el tema no me interesa demasiado, pero siendo Cronenberg el director, no es como para hacer ascos.
¿Pero qué pasa por Antequera? Supongo que si no viviese en Barcelona, donde hay muchos cines y mucha variedad, también acabaría bajándome pelis de Internet.
Yo vi esta peli porque es del David Cronenberg, que como digo tengo todas sus pelis en el blog, porque la historia del psicoanálisis a mí me daba bastante igual. Pero todo lo que se cuenta es bastante interesante.
En Antequera sólo tenemos un multicine con 8 salas y san se acabó. Una maravilla, vamos.
Lo de bajarme películas que no puedo ver en cine me parece casi una necesidad viendo el panorama que tenemos en el pueblo, pero también me bajo películas antiguas para saber si vale la pena comprarlas o no, por eso de no tirar el dinero en algo que ni me gusta. Eso si, como la película me mole la compro sí o sí, por eso no me considero un "piratilla", sólo un tipo que prefiere prevenir.
Tengo ganas de verla, todavía no llega por acá y me interesa mucho Cronenberg, es muy grato ver esa lucha entre lo emocional y la razón estricta, la primera es inevitable y la segunda nos define como civilización pensante, el mundo ideal digamos aunque tampoco se trata de genios. Y seguro que todos tenemos algunas locuras o particularidades, lo de Sheldon ya es caricatura pero reconozco que me gusta la serie, no debe ser tan difícil ser franco y poder mantener nuestro parecer sin discutir, aunque el que más me divirte es Howard, el geek "sensual". Abrazos.
Mario.
Estoy contigo en que el cine de Cronenberg es personal, único y con unas constantes que marcan su estilo. Me tira la peli por todo… también por eso que a ti no te interesa tanto, el psicoanálisis, y que creo que no se profundizará demasiado en la peli de Cronenberg.
Dr. Gonzo, ya digo que si estuviera en tu situación haría lo mismo.
Mario, creo que lo que la hace interesante no es tanto la lucha entre emoción y razón, sino el intentar suprimir las emociones lo que acaba provocando el conflicto en la película.
Javier Simpson, habiéndola visto te digo que sí se trata el psicoanálisis. Obviamente el centro de la película es la relación entre Jung, Spielrein y Freud, pero a través de como se desarrolla esa relación se pueden ver las claves del desarrollo de esta técnica, más que nada a través de las discusiones entre los personajes.
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