Bueno, ya tenemos otro remake de un clásico ochentero encima. Aún intento digerir que van a hacer un remake de Una pandilla alucinante (The Monster Squad, Fred Dekker, 1987) que ya casi tenemos encima la nueva versión de la clásica Noche de Miedo (Fright Night, 1985) escrita y dirigida por Tom Holland que muchos recordaréis por su otro film de culto: Muñeco diabólico (Child's Play, 1988). Y que conste que no tengo nada en contra de los remakes. De hecho algunos de mis mejores amigos son remakes, pero es que dentro de nada se les van a acabar las pelis de los ochenta de las que hacer versiones. Y otra cosa, ¿dónde están los nuevos mitos? Freddy, Jason, Chucky, Pinhead... Todos surgieron en esa mágica década para el género que fueron los ochenta. Ahora tenemos a Jigsaw (de las pelis de Saw) y a nadie más. Y Jigsaw tampoco es que tenga el carisma de Jason Voorhees porque Jigsaw es un listo y a nadie le gustan los listos.
En fin, vayamos a la película. Por si hay alguien que no la ha visto: el joven Charley Brewster (William Ragsdale) se asoma a la ventana de su habitación una noche ya que le ha parecido ver una chica desnuda en la casa de su nuevo vecino. Entonces es testigo de como el vecino mata a la chica ya que resulta que es... ¡un vampiro! El atractivo Jerry Dandrige (Chris Sarandon) es un vampiro que ha decidido mudarse a un tranquilo barrio residencial. Cuando ni siquiera su novia Amy (Amanda Bearse) ni su mejor amigo Ed (Stephen Geoffreys) le crean, Charley recurrirá a la única persona que seguro le puede ayudar: Peter Vincent (Roddy McDowall), presentador del programa "Noche de miedo". Y hasta aquí puedo leer.
La gran interpretación de Roddy McDowall como el cobarde, egocéntrico y fracasado Peter Vincent es una de las principales razones por las que la película funciona, proporcionando algunos de los momentos más divertidos de la película. Chris Sarandon también ofrece una buena interpretación como el seductor vampiro Jerry. Uno tiene la sensación que ambos actores se lo están pasando bomba y esa sensación se contagia al espectador.
Tom Holland, que ya había conseguido subir una tremenda montaña con el guión de Psycho II (Richard Franklin, 1983), nos ofrece un guión muy inteligente en el que se hace homenaje a los clásicos del cine de vampiros al mismo tiempo que los moderniza. A pesar de los toques de comedia, el vampiro es una auténtica amenaza como nos muestra en escena de la seducción de Amy. Si bien era su primera película como director, Holland ya acumulaba a sus espaldas una larga experiencia como guionista y este contacto con diferentes directores supongo que es parte de la razón por la que su primera película como director no parece su primera película.
La película fue un gran éxito y por ello se hizo una segunda parte: Noche de miedo II (Fright Night Part 2, 1988). La película fue dirgida por Tommy Lee Wallace y escrita por Wallace, Miguel Tejada-Flores y Tim Metcalfe. Wallace había trabajado como editor con John Carpenter, pero no se le había pegado mucha cosa del maestro ya que si bien la película resulta simpática en algunos momentos (momentos McDowall) no resulta muy memorable.
Una cosa positiva del remake es que seguramente editarán una edición especial en DVD de la película porque la que existe en la actualidad no tiene ni-un-solo-extra.
En fin, vayamos a la película. Por si hay alguien que no la ha visto: el joven Charley Brewster (William Ragsdale) se asoma a la ventana de su habitación una noche ya que le ha parecido ver una chica desnuda en la casa de su nuevo vecino. Entonces es testigo de como el vecino mata a la chica ya que resulta que es... ¡un vampiro! El atractivo Jerry Dandrige (Chris Sarandon) es un vampiro que ha decidido mudarse a un tranquilo barrio residencial. Cuando ni siquiera su novia Amy (Amanda Bearse) ni su mejor amigo Ed (Stephen Geoffreys) le crean, Charley recurrirá a la única persona que seguro le puede ayudar: Peter Vincent (Roddy McDowall), presentador del programa "Noche de miedo". Y hasta aquí puedo leer.
La gran interpretación de Roddy McDowall como el cobarde, egocéntrico y fracasado Peter Vincent es una de las principales razones por las que la película funciona, proporcionando algunos de los momentos más divertidos de la película. Chris Sarandon también ofrece una buena interpretación como el seductor vampiro Jerry. Uno tiene la sensación que ambos actores se lo están pasando bomba y esa sensación se contagia al espectador.
Tom Holland, que ya había conseguido subir una tremenda montaña con el guión de Psycho II (Richard Franklin, 1983), nos ofrece un guión muy inteligente en el que se hace homenaje a los clásicos del cine de vampiros al mismo tiempo que los moderniza. A pesar de los toques de comedia, el vampiro es una auténtica amenaza como nos muestra en escena de la seducción de Amy. Si bien era su primera película como director, Holland ya acumulaba a sus espaldas una larga experiencia como guionista y este contacto con diferentes directores supongo que es parte de la razón por la que su primera película como director no parece su primera película.
La película fue un gran éxito y por ello se hizo una segunda parte: Noche de miedo II (Fright Night Part 2, 1988). La película fue dirgida por Tommy Lee Wallace y escrita por Wallace, Miguel Tejada-Flores y Tim Metcalfe. Wallace había trabajado como editor con John Carpenter, pero no se le había pegado mucha cosa del maestro ya que si bien la película resulta simpática en algunos momentos (momentos McDowall) no resulta muy memorable.
Una cosa positiva del remake es que seguramente editarán una edición especial en DVD de la película porque la que existe en la actualidad no tiene ni-un-solo-extra.
4 comentarios:
Amy vampirizada tiene la boca mas grande y mas ancha que he visto de un vampiro en esa boca cabía mas de una víctima,la segunda parte también la vi y creo que el protagonista tienes mas química con su nueva novia que la que tenía con Amy.
La verdad es que desde que escribí este artículo a ahora, la segunda parte me ha ido gustando más y también me gusta más la nueva novia.
Me gusto que los vampiros tenga cierta tolerancia hacia ciertas debilidades pero me saco mucho que Ed se convierta en hombre lobo, como un sin sentido bastante grave. Aunque los maquillajes están muy bien hechos para la época.
Los vampiros, tradicionalmente, también se pueden transformar en lobo, por lo menos Drácula, y no se sabe exactamente qué le hace el personaje de Chris Sarandon a Ed además de morderle, así que no me pareció un sin sentido que Ed se convierta en hombre lobo.
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