28 feb 2022

Everybloody's End


 

Claudio Lattanzi alcanzó efímera fama (o infamia) como director de Killing birds. Los pájaros asesinos (Killing Birds: Raptors aka Zombie 5: Killing Birds, 1988). La película no solo ha sido objeto de burlas y escarnio (algo injustas), además el trabajo de Lattanzi como director también se vio cuestionado por periodistas y articulistas que atribuyeron las tareas de dirección a Joe D'Amato, que trabajó como director de fotografía en este delirante y neblinoso título de la edad dorada del videoterror.

Desengañado, Lattanzi dejó el mundo del cine, dirgiendo solo ocasionalmente proyectos de poca relevancia como un documental y un corto. Sin embargo, en 2019 volvió a estrenar una película como director: Everybloody's End. La película, un proyecto independiente de bajo presupuesto, llamó la atención de los fans por incorporar a su reparto nombres clásicos del género en el reparto como Giovanni Lombardo Radice, Cinzia Monreale y Marina Loi. Los efectos especiales de maquillaje fueron obra de otro nombre clásico del cine de terror italiano: Sergio Stivaletti, que también tiene un cameo en el film.

Si ha servido de algo esta película es confirmar, por lo menos para mí, que Lattanzi fue, efectivamente, el director de Killing Birds. Everybloody's End tiene el mismo tipo de narrativa vaga y nebulosa, que en sus 75 minutos de metraje concentra una historia posapocalíptica y un homenaje a la Hammer. A partir de unos personajes encerrados en un búnker, huyendo de un grupo de asesinos que se dedican a "purificar" el devastado mundo en que viven. Devastado a causa de un plaga que ha diezmado a gran parte de la población, lo que le da un toque profético al film. Lattanzi llena la película con alusiones y referencias a sucesos del pasado pero sin que tampoco quede nada claro sobres los personajes. Los homenajes al género se van sucediendo, concluyendo en un clímax en el que la película da un giro de 180 grados haciendo que te preguntes qué has estado viendo.

A pesar del bajo presupuesto, el film tiene un acabado bastante digno, mucho mejor que el aspecto que tenían las producciones de género de bajo presupuesto de finales de los 80, cuando la industria se estaba colapsando. Pero, de todas formas, Everybloody's End tiene el mismo estilo narrativo de la época, con hilos argumentales que parece se van abriendo al azar para quedar luego descartados. Es justo esta narrativa onírica lo que hace que resulte un film atractivo, especialmente a los fans del cine de género italiano de los 80.