19 ene 2011

Pat Garrett y Billy el niño (Pat Garrett & Billy the Kid)



Sam Peckinpah tuvo una conflictiva relación con los grandes estudios, con lo que por desgracia no pudo disfrutar en vida ver como sus películas eran estrenadas y vistas como él quiso por el público.

En Pat Garrett y Billy el niño (Pat Garrett & Billy the Kid, 1973) retoma el tono de violenta elegía de la clásica Grupo salvaje (The Wild Bunch, 1969) para presentarnos la historia de  como Pat Garrett persiguió a Billy el niño. De nuevo, vemos como el protagonista, un fantástico James Coburn como Pat Garrett, atraviesa un interesante conflicto moral y ético entre lo que debe hacer y lo que quiere hacer. Y como era la marca de Peckinpah, mezcla escenas violentas con otras cargadas de un fuerte componente lírico, destacando en este aspecto la famosa escena de la muerte del sheriff Baker (Slim Pickens), musicada con el Knockin' On Heavens Door que compuso Bob Dylan para esa escena en concreto creando un momento en el que melodía, letras e imágenes se complementan a la perfección.

Como supongo que la mayoría, la versión que yo vi por primera vez de esta película es la versión de dos horas que se conoce como "el montaje del director" y es la versión que pasaron en el programa de cine que Àlex Gorina tenía en el canal autonómico Canal 33. Y es una versión que me gustó mucho. Sin embargo, en el 2005 apareció una edición especial en DVD que incluía un nuevo montaje siguiendo las notas que había dejado Peckinpah y que es muchísimo mejor que la versión previa, que, por lo que parece, era la primera versión que editó Peckinpah antes de que fuera destrozada por el estudio y no la definitiva.

Esta nueva versión es realmente una obra maestra, que recupera la canción de Dylan en la anteriormente mencionada escena, ya que elimina las escenas redundantes y reintegra la energía que Peckinpah imprimía a sus películas, cuando todavía se encontraba bien de salud.

La película hace equilibrios entre la figura romántica de Billy el niño y la figura histórica, presentándonos a un forajido humano por el que sentimos cierta simpatía, especialmente cuando las fuerzas del orden son representadas como entidades corruptas. De nuevo, recordando a Grupo salvaje. Por ello el retrato de Garrett oscila entre la tristeza y la determinación. En ocasiones, Garrett me recuerda al Marlowe de Raymond Chandler: el último hombre honesto en un mundo corrupto.

También es inevitable realizar un paralelismo entre esta película y la propia vida de Peckinpah. Esta película se sitúa en la última y más conflictiva etapa de su vida, caracterizada por la lucha contra los estudios y por hacer las películas siendo fiel a su propia integridad artística a pesar de las fuerzas en contra, como un forajido contra las fuerzas de la ley. Ésta y la siguiente Quiero la cabeza de Alfredo García (Bring Me the Head of Alfredo Garcia, 1974) son realmente las últimas películas interesantes que hace y luego, igual que Garrett en la película, ya no sería el mismo, a pesar de contar con la ayuda de amigos como Kris Kristofferson (Billy en la película) que le echaban una mano.

Si sólo habéis visto una versión de este clásico, os insto a adquirir la edición especial y comparar ambas versiones, dejando de lado la versión del estudio, claro. Si no la habéis visto no perdáis oportunidad de verla. Y oírla, la banda sonora de Bob Dylan es realmente fantástica.

8 comentarios:

Javier Simpson dijo...

Le tengo muchas ganas a esta peli de Peckinpah. Has mencionado Quiero la cabeza de Alfredo García; es cierto que es de las últimas buenas que realizó; tiene un algo a Los tres entierros de Melquíades Estrada en cuanto a los mexicanos y su cultura por la muerte. El hecho de llevar un cadáver a un pueblo para ser enterrado y de respetar lo que quería en vida el personaje de Melquiades, aunque por el camino se vaya pudriendo, y el de llevar la cabeza de un muerto para cobrar una recompensa, también pudriéndose por el camino, mientras la familia del muerto trata de recuperar la cabeza por ese respeto a los muertos, es similar en cuanto a ese hecho cultural; además de la similar utilización de la violencia en una y otra película, contundente y sin ningún tipo de preciosismo.
La de Pat Garret y Billy de Kid intentaré verla cuanto antes (aunque ahora mismo estoy dudando si ya lo hice con 20 años o así, me da que sí recordando a Kris Kristofferson), pero será difícil que consiga la versión que nos recomiendas, Raül. No sé si la podría conseguir en Vigo. Un saludo y, como siempre, muy buena entrada (voy a terminar aburriéndome de decírtelo :)

Dr. Gonzo dijo...

Genial pelicula y muy buena entrada.
Esta, y Quiero la cabeza de Alfredo Garcia son mis dos peliculas favoritas de este director, tan revolucionario y referente de muchos directores actuales.

Recuerdo que vi una versión, pero no sabria decirte cual es. Tengo la película en dvd, y me vienen dos versiones distintas.

Raúl Calvo dijo...

Javi y Dr. Gonzo, también comento la de Quiero la cabeza de Alfredo Garcia en el blog, se me olvidó poner el enlace.

Dr. Gonzo, la que es un poco más corta es la mejor versión para mí, la reconstruida siguiendo las notas de Peckinpah, en caso de que tengas la misma edición especial que yo.

Javi, si en Vigo tenéis un Fnac o un Corte Inglés puedes probar a pedirla en caso de que no la tengan ya. Si no tienes por internet Dvdgo, por ejemplo. Fnac también tiene tienda por internet.

Javier Simpson dijo...

Gracias, Raül. Me pongo a ello :)

Dr. Gonzo dijo...

en la caja del dvd pone que dura 110 minutos...
Esta misma noche le pego un revisionado.

Ariadna dijo...

Hola Raúl, acabo de echar un vistazo a tu blog y es buenísimo y muy currado. Me quedo absolutamente alucinada de la capacidad de escribir y publicar que tenéis todos en vuestros blogs. A mí me cuesta ponerme, siempre digo que soy un poco vaga, y es verdad. Cuando tengo algo de tiempo, me suele apetecer más leer que escribir, aunque cuando empiezo a escribir, me enrollo un montón...

No he visto ninguna de Peckinpah, me temo que tanta violencia me agobia un poco... A veces pienso que quiero ver Perros de paja, pero sólo porque el prota es Dustin Hoffman, al que adoro. Pero sé que no me iba a gustar una peli tan violenta, así que siempre desisto. Saludos!

Raúl Calvo dijo...

Dr. Gonzo, creo que la buena está en el segundo disco.

Raúl Calvo dijo...

Ariadna, primero: bienvenue, welcome, bienvenida. Te contesto aquí los comentarios que has dejado sueltos por varios posts:

Tal como está la distribución de cine en España, es cierto que muchas veces el único recurso que te dejan es recurrir a la piratería. Y el blu-ray también me lee los dvd, así que no hay problema por ahí.

De Iñárritu también me gustó Amores Perros, pero luego, cuando empezó a regodearse en la tragedia y buscar el melodrama fácil perdí interés.

Si no te gusta la violencia es difícil que te pueda gustar una de Peckinpah, pero no imposible: La balada de Cable Hogue es una historia de amor que fue criticada en su momento precisamente por no ser nada violenta. Aunque también te digo que Peckinpah no se regodea en la violencia ni es gratuita, todo lo contrario.