Roberto (Ray Lovelock) y Patrizia (Anna Maria Rizzoli) son un matrimonio que decide experimentar yendo a pasar unas horas a un "hotel para parejas". Cuando están regresando descubren que alguien ha colocado el cadáver de una mujer en el maletero de su coche. Implicados de esta manera, Roberto y Patrizia serán reclutados por el comisario De Sanctis (Anthony Steffen) para investigar una trama de chantajes y asesinatos que tienen el Play Motel como origen.
Play Motel se estrenó en las pantallas italianas cuando el giallo había perdido popularidad entre los espectadores debido al gran número de títulos estrenados durante los 70, la excepción eran las películas de Dario Argento que continuaban siendo éxitos de taquilla. Para atraer a más espectadores, películas como Play Motel mezclaban el giallo con otros géneros. En este caso, se le añadieron unas gotas de poliziotteschi (thrillers policiales a la italiana) y bastante erotismo. Por si eso fuera poco, se hizo otra versión a la que se le añadieron insertos pornográficos. Estos insertos fueron realizados a instancia de los productores sin que el director ni el reparto supiera nada. Mario Gariazzo se mostró muy ofendido cuando lo descubrió (se entiende más sabiendo que Gariazzo había dirigido principalmente melodramas para toda la familia) y también se lo tomaron mal la pareja protagonista, Ray Lovelock y Anna Maria Rizzoli, especialmente Rizzoli ya que podía afectar muy negativamente a su reputación como actriz si daba la impresión que había participado voluntariamente en una película porno.
Esta costumbre de la doble versión con insertos porno era bastante común en la época. Pero mientras se puede entender, hasta cierto punto, que se añadieran en una película como Malabimba (Posesión de una adolescente) (Malabimba, Andrea Bianchi, 1979), que era una película principalmente erótica, en Play Motel están fuera de sitio, aunque haya más escenas sexys de lo que era habitual en el género. Pero, por el argumento solo, lo cierto es que Play Motel es bastante clásico. La idea de la policía reclutando a un matrimonio para investigar de incógnito los crímenes que tienen origen en un motel es bastante absurda, lo que le da un toque juguetón a lo Agatha Christie que contrasta bastante con las escenas sórdidas que tienen lugar dentro del motel. A lo que se le ha de añadir los toques perversos que uno solo puede encontrar en el giallo, como la escena en que una víctima de chantaje llama a su abogado buscando ayuda, caso que el abogado comenta sin problemas con la mujer con la que comparte la cama que resulta ser la esposa de la víctima. Por suerte, la edición en Blu-ray incluye los insertos porno aparte como una curiosidad y no insertados en la película, porque podían romper el ritmo de este giallo que se mueve bastante rápido a pesar de su retorcida trama.
Play Motel no es, de ningún modo, un clásico a descubrir. Pero para el fan que disfruta con la fórmula del género, el film de Gariazzo resulta bastante entretenido, gracias también a unas buenas interpretaciones y a una pegadiza banda sonora.