7 abr 2015

Gomia, terror en el Mar Egeo (Anthropophagus)

He aquí una película que no necesita presentación. Si no la has visto ya, sin duda has oído hablar de ella o te has cruzado con su memorable póster en infinidad de páginas dedicadas al cine de terror. Su reputación como película muy gore y brutal precede a Gomia, terror en el Mar Egeo (Anthropophagus, Aristide Massaccesi como Joe D' Amato, 1980), aunque en realidad no es tan gore ni brutal como podría parecer.

Un grupo de turistas se queda atrapado en una isla cuyos habitantes han sido asesinados (y parcialmente devorados) por un demente y monstruoso asesino. Los turistas se convierten en las nuevas víctimas de este asesino, de modo que deberán buscar una manera de salir de la isla o acabar con el asesino antes de que este acabe con ellos.

Dirigido por un autor de culto como Joe D'Amato, en el reparto también nos encontramos a diversos rostros familiares del género como son George Eastman, colaborador habitual de D'Amato que aparece en títulos como Magia negra (Baba Yaga, Corrado Farina, 1973) o Las noches eróticas de los muertos vivientes (Le notti erotiche dei morti viventi, Joe D'Amato, 1980); la protagonista Tisa Farrow os resultará familiar por su papel en Nueva York bajo el terror de los zombi (Zombi 2, Lucio Fulci, 1979); y Zora Kerova por sus intervenciones en Caníbal feroz (Cannibal ferox, Umberto Lenzi, 1981) y El destripador de Nueva York (Lo squartatore di New York, Lucio Fulci, 1981). De modo que solo por la gente que participó en su realización, la película ya estaba destinada a tener cierta fama "de culto". Pero lo que le dio el impulso definitivo fue los problemas con la censura y el hecho de que fuera en un principio prohibida en Inglaterra donde uno de los censores se pensó que se había topado con un auténtico video "snuff".

Es posible que si alguien la ve hoy día se sienta un poco decepcionado si solo busca una película de sangre y tripas. Para la época en que se estrenó, la película es bastante explícita y sangrienta, pero no mucho más de lo que lo eran sus contemporáneas italianas llenas de zombis y caníbales que de forma regular destrozaban con alegría cuerpos humanos en la gran pantalla. Además, hoy día sus efectos no resultan tan efectivos como hace cuarenta años. Por supuesto, las dos escenas que le han dado fama siguen resultando bastante espectaculares: el momento en el que el asesino al que da vida Eastman arranca el feto del interior de una de las víctimas que está embarazada y le pega un señor mordisco y el memorable final.

Pero al desempolvar el DVD (para ver si valía la pena hacerse con su próxima edición en Blu-ray), me he convencido de que merece su fama de film de culto no tanto por la sangre sino por lo bien hecha que está. Sí, los asesinatos son impresionantes, pero también aprecio (incluso valoro más) la atmósfera que D'Amato crea a lo largo de Anthropophagus en esa isla desierta llena de cadáveres. La ambientación suma a la experiencia visceral, resultando en una película que acaba resultando efectiva y entretenida a pesar de su guion absurdo (pero en el buen sentido) y las interpretaciones regulares.

Antropophagus no es una película para ver con el cerebro sino con el corazón. Es decir, no hay que pararse a analizar la trama o la lógica de la película, simplemente hay que dejarse llevar y disfrutarla como disfrutaríamos una historia particularmente truculenta que alguien nos contase alrededor de una hoguera. De modo que, como me ha sorprendido al ser mejor de lo que la recordaba, la recomiendo, en su versión sin cortes ni censura, a los fans del género que todavía no la hayan visto. Como veréis, el tráiler que podéis ver abajo muestra uno de los muchos y diversos títulos que ha tenido la película a lo largo de los años.


2 comentarios:

Dr. Gonzo dijo...

La vi hace muchos años y conservo un recuerdo muy grato. Me llamó la atención que, pese a ser una película gore (de las que no dan miedo, sino asco), me pareció bastante inquietante y con una atmósfera muy conseguida. Igual estoy diciendo locuras porque los años que han pasado me están jugando una mala jugada, pero creo que no.

Raúl Calvo dijo...

No vas desencaminado, no. Yo diría que no es gore, solo tiene unas escenas explícitas, un poco como una peli de Lucio Fulci.