11 dic 2010

Sam Raimi's Ultimate Experience in Gruesome Horror



Un verano que tendría yo unos diez años o poco más, vi una emisión nocturna de Posesión Infernal (The Evil Dead, Sam Raimi, 1981). Os confieso que aquella primera vez que la vi me dio demasiado miedo para verla entera y cuando faltaba poco para el final apagué la televisión, completamente aterrorizado. Sin embargo, desde entonces hasta ahora la he visto infinidad de veces, así como sus continuaciones. Tuve una preciada copia en vídeo que atesoré durante años, tengo también un par de ediciones en DVD y una en Blu-ray. Además he ido acumulando información inútil sobre esta trilogía de películas que ahora me dispongo a compartir con todos vosotros, para que seáis los más populares cuando salgáis de fiesta.

Within the Woods (1978): Éste es un cortometraje que filmó el equipo de amigos que había reunido Sam Raimi para rodar The Evil Dead y que en gran parte consistía en los amigos con los que durante años rodó pequeños cortos en 8mm. El corto fue rodado con el objetivo de recaudar dinero enseñándoselo a los posibles inversores como una muestra de lo que podían hacer. Se trata de una versión de media hora de Evil Dead, pero aquí se trata de un joven (Bruce Campbell) que encuentra una punta de flecha paseando por el bosque, despertando a los demonios que habitan en él. Aparte de Bruce Campbell, también sale Ellen Sandweiss y ambos intercambian papeles en el corto respecto a la película: aquí es Ellen la víctima y Bruce el poseído que la atormenta. También señalar que durante el corto se inventaron algunos gags sangrientos que se aprovecharon posteriormente en Evil Dead. La cualidad del corto es difícil de juzgar ya que visualmente la calidad del soporte en que la vi estaba bastante vapuleada. Pero diría que es algo para los muy fans que sientan curiosidad por ver una versión previa de Evil Dead.

Posesión Infernal (The Evil Dead, 1981): La revolucionaria ópera prima de Sam Raimi que Stephen King calificó como una de las películas de terror más originales que había visto. Un histérico ejercicio que pone a prueba los nervios del espectador en un increíble tour de force visual. Originalmente la película se llamaba Book of the Dead (el libro de los muertos), pero un distribuidor les dijo que con ese título la gente pensaría que era una película muy intelectual y cambió el título a The Evil Dead (los muertos diabólicos) que era mucho más claro. La película se filmó durante el gélido invierno de 1979 a 1980. Sin apenas presupuesto, con unos crudos efectos especiales, en unas condiciones casi insoportables se llevó a cabo el rodaje, que además era bastante complicado debido a los imaginativos planos que ideó Raimi. El resultado en pantalla de tanto esfuerzo deja sin aliento. Es cierto que los efectos especiales son algo rudimentarios, debido a la falta de dinero y la inexperiencia del equipo, pero si uno es capaz de ver más allá le espera una experiencia memorable.

Uno de los puntos fuertes de la película es su sencillo argumento: cinco universitarios que van a pasar el fin de semana en una cabaña perdida en el bosque. Allí despiertan los demonios del bosque que poseen a algunos de ellos. Este sencillo argumento posibilita a Raimi asaltar al incauto espectador con un estilo visual difícil de igualar. Tras veinte minutos de inquietante atmósfera, Raimi apreta el acelerador y la siguiente hora es una acumulación de horror tras horror. Raimi desarrolla lo que yo he bautizado "terror histérico", ya que provoca en el espectador una reacción extrema que le lleva a apartar la mirada horrorizado o soltar una carcajada. A ello también contribuye la manera que tiene de alargar las escenas: empieza siendo perturbador, luego aterrador y finalmente, al ver que la escena sigue, uno tiene que reírse para mantenerse cuerdo.

Otro de los fuertes es el diseño de sonido: la infame escena en que una poseída Cheryl (Ellen Sandweiss) le clava el lápiz en el tobillo a Linda (Betsy Baker), aparte de por la malvada y alegre saña con que Cheryl se lo clava, resulta también efectiva por el desgarrador grito de Linda. También la parte final de la película, en que la locura total se adueña de la pantalla, el sonido tiene una importancia determinante para enervar al espectador y ponerlo al borde del asiento. Os confieso que con un buen sistema Home Cinema puede llegar a ser una experiencia abrumadora y brutal. Genial, en otras palabras.

La película también fue el debut en pantalla grande, no sólo de Sam Raimi, también del gran Bruce Campbell como Ash. Aunque en esta primera película está un poco soso y aún no ofrece los festivales interpretativos que nos ofrecería a continuación. También sería la primera colaboración entre Raimi y los hermanos Coen, que se conocieron en la posproducción de la película.

Imagino que si sois fans del cine de terror estáis de sobra familiarizados con esta película y su importancia dentro del género. En caso contrario, explicaros que fue estrenada sin censurar (unrated) y su mezcla de humor y sangre a borbotones marcaría una importante tendencia dentro del género en los ochenta, dando lugar a una edad dorada del género.



Terroríficamente muertos (Evil Dead II: Dead by Dawn, 1987): Después de la agridulce experiencia de Ola de crímenes, ola de risas (Crimewave, 1987), colaboración entre los Coen y Raimi que fue maltratada por los ejecutivos del estudio para el que la filmaron, Raimi decide retornar a sus orígenes con una secuela de su film debut. La película mezcla de manera más evidente la comedia y el terror, además de que al tener medios más holgados el dominio que ejerce Raimi de la cámara es admirable, creando planos espectaculares con asombrosa habilidad.

Bruce Campbell está en plena forma y la mejor parte de la película es la primera, donde tenemos a Ash enfrentándose solo a demonios y a su mano poseída. El humor se hace más patente, y Raimi hace gala de  la influencia de Chuck Jones en varias escenas. Hay que señalar también que, como no pudo conseguir los derechos para mostrar imágenes de la primera película, los cinco primeros minutos son una nueva versión de Evil Dead, que luego enlaza con el nuevo material a partir de la recreación del plano final de la primera.

Si bien carece de la furiosa energía e inventiva de la primera entrega, Evil Dead II fue instrumental a la hora de convertir a Bruce Campbell en un icono de la serie B y expandir la legión de fans de Sam Raimi. Es una película divertida, excitante e imaginativa que te coge del cuello y te monta en una montaña rusa de emociones.



El ejército de las tinieblas (Army of Darkness, 1992): Sobre la tercera entrega ya escribí un largo post en el que comento las diferentes versiones que existen, lo podéis leer aquí. Solamente añadir que la reciente edición en nuestro país de la película en DVD y Blu-ray es un timo. Pobre calidad de audio e imagen, sin todos los extras, decepcionante y más teniendo en cuenta las numerosas ediciones que hay en Europa y Estados Unidos. Pero el nuestro es un país que tiene la costumbre de maltratar a los aficionados. Me parece increíble que me acabe de comprar, por ejemplo, una edición en Blu-ray de tres discos de Battle Royale (Batoru rowaiaru, Kinji Fukasaku, 2000) al mismo precio que te cuesta aquí una sencilla película sin ningún extra.



Evil Dead The Musical: Mientras rumores de remakes y nuevas continuaciones se van propagando, los fans se pueden consolar con la versión musical que, combinando la primera y segunda parte, hicieron George Reinblatt, Frank Cipolla, Melissa Morris y Christopher Bond en el 2004. La obra es una parodia-homenaje de las películas en las que abundan las referencias metalingüísticas y los guiños a la tercera entrega (introduciendo en el diálogo algunos de los memorables one-liners de ésta). Es muy divertida y la música resulta tremendamente adecuada, con un tono que mezcla ironía y camp, siendo una de mis favoritas All The Men In My Life Keep Getting Killed By Candarian Demons. Vuelve a los orígenes de la primera entrega, es decir, es una obra tremendamente sangrienta y, de hecho, se pueden adquirir unos chubasqueros para aquellas personas en la primera fila que no quieran que sus ropas queden cubiertas de sangre falsa. También tiene otros detalles graciosos para los fans: en una escena Cheryl aparece leyendo la autobiografía de Bruce Campbell o el comentario de Jake sobre la ausencia de Bobbie Joe en la obra. Es posible que no tengáis oportunidad de viajar a Estados Unidos y verla en directo, por lo tanto os recomiendo que compréis la grabación del reparto original en Amazon o algún sitio parecido. La única pega es que han cambiado el final de la obra para hacerlo igual que el de Evil Dead II, introduciendo la nueva canción Hail To The King, cosa que me decepcionó porque me parece mucho más divertido el final original (el que aparece en el álbum) con  la canción Blew That Bitch Away.

La obra enlaza con la tradición del Grand Guignol francés, un antecedente del cine gore que consistía en obras representadas a finales del XIX, si no recuerdo mal. Con lo cual se cierra un círculo que va del teatro al cine y de vuelta al teatro.

3 comentarios:

Dr. Gonzo dijo...

genial saga de culto para todo amante del genero fantastico y de terror, esta vez, aderezado con humor y absurdo.

Precisamente, hace poco dediqué en mi blog un repaso a toda la saga.

Javier Simpson dijo...

Te puse algo sobre la bestia debe morir. La vi el otro día...

Sobre las pelis que pones en el post, decir que me gustó mucho la de Raimi Posesión infernal. Es terrorífica; se te ponen los pelos de punta y dan grima cuando se convierten los personajes.
El musical no lo he visto, pero debe estar divertido, seguro.

Raúl Calvo dijo...

Me alegro que te gustase La Bestia... Nunca sé si las pelis que pongo están muy vistas o son muy desconocidas y me gusta descubrir nuevas pelis a la gente. Ahora échale un vistazo a Forbidden Zone para algo realmente diferente.