3 feb 2011

Arrebato



Recuerdo que después de ver por primera vez Arrebato (1980) de Iván Zulueta salí a la calle aturdido. Todo lo que me rodeaba, las tiendas, la gente, se me hacía irreal. La película me había impactado con tremenda fuerza y me dejó absolutamente fascinado.

Esta película maldita de culto tiene diversas capas y funciona a diversos niveles. La historia está protagonizada por Eusebio Poncela como José Sirgado, director de cine que una noche de trabajo (dando los últimos detalles a una película de vampiros, nada menos) llega a casa y se encuentra dos cosas que le trastocarán su vida: su ex pareja Ana (Cecilia Roth) y una película enviada por un antiguo conocido, Pedro (Will More). Mientras la relación entre Ana y José se complica y descomplica de forma continua, iremos viendo como se desgrana la historia de Pedro a través de la película que ha enviado a José.

Empecemos por el nivel básico: la historia que cuenta la película. Si tenemos que enmarcarla de alguna manera, se podría decir que se trata de una película de vampiros en la cual el monstruo es la cámara. Los diversos experimentos que realiza Pedro con la cámara y las imágenes parece que van alimentando a un monstruo insaciable que va absorbiendo la energía y la cordura de Pedro. Al mismo tiempo, atrapa a José que en un principio sigue la historia para evitar las complicaciones de su historia con Ana. Zulueta nos atrapa también a nosotros, que nos vemos absorbidos por la historia y por la curiosidad de ver hacia dónde conducirán los experimentos de Pedro. Como película de terror funciona no en el sentido habitual, es más bien el conjunto final que deja una sensación de sordo horror dentro del espectador, una inquietud que Zulueta va dosificando a lo largo de la película y cuyos efectos vamos notando de forma gradual.

Luego tenemos el factor más comentado por todo el mundo: las drogas. Las drogas están presentes a lo largo de la película ya sea de forma directa (la heroína que se chutan José y Ana) o de forma alegórica (la obsesión de Pedro por filmar imágenes). En los ochenta se produce un boom en cuanto a consumo y tráfico se refiere de drogas en España, algo parecido a la época del destape con los desnudos. Es en esa época que surge el género quinqui en el cine español, películas que se dedicaban a retratar el mundo de la delincuencia y las drogas como El pico (Eloy de la Iglesia, 1983) o Deprisa, deprisa (Carlos Saura, 1981). Las drogas estaban de moda. La movida madrileña y su entorno no eran ajenos a ello, por tanto es algo natural que las drogas hiciesen acto de presencia en una película de alguien que estaba involucrado en ese movimiento. Sin embargo, el retrato que se hace en Arrebato de las sustancias estupefacientes se centra en un único aspecto de las drogas: la adicción.

La relación que existe entre José y Ana es paralela a la relación que ambos mantienen con la heroína. La dejan, se desenganchan, la vuelven a dejar y se vuelven a enganchar. Del mismo modo, la relación entre ambos pasa del amor al odio en un instante. Intentan no hacerse daño, pero al mismo tiempo no pueden evitarlo. Pedro tampoco es ajeno a las drogas, las utiliza muchas veces para filmar, pero su auténtica adicción es captar el misterio de las imágenes en movimiento. Pedro ha consagrado toda su existencia a filmar, filmar y filmar. Y, como si fuera el protagonista de una novela de Phillip K. Dick, descubre que hay algo oculto tras lo que parece ser la realidad.

Arrebato también habla de la fascinación por el cine. Ambos protagonistas están relacionados de alguna manera con el cine. Y es esa pasión por las imágenes en movimiento la que les llevará a la locura. Por un lado José  se dedica al cine de forma profesional, de manera que de forma gradual ha ido erosionando sus primeras ilusiones. Pedro, por otro lado, está fascinado no por el cine como todos lo entendemos, sino por filmar cosas, personas. La magia de capturar un trozo de realidad y proyectarlo en una pantalla para alterarlo. Alterar las imágenes filmadas es como alterar la realidad misma.


Después de su fugaz estreno en 1980, la película estuvo desaparecida durante décadas, ganando peso su fama de maldita y de película de culto. En los primeros años del siglo XXI, la película se reestrenó y fue redescubierta. Al poco tiempo, hacia 2004 más o menos, se hizo una primera edición en DVD, que puso a la venta El País, y en el 2008 se editó una estupenda edición de dos discos, que recomiendo a todo aquel interesado en la película.

Si no la conocéis es un vacío que deberíais llenar, ya que se trata de una película realmente única. Personalmente, me provocó un efecto parecido al de cuando vi 2001 de Stanley Kubrick en una pantalla de cine. Inolvidable.

No he encontrado ningún tráiler y he preferido no poner fragmentos fuera de contexto que puedan arruinar grandes momentos de la película. Por lo tanto, me he decidido por otra de mis grandes pasiones:

13 comentarios:

Einer dijo...

He visto esta película sólo una vez y es evidente que requiere un segundo visionado.
La sensación que provoca la primera vez no puede ser descrita de otra forma que la de sentirse "arrebatado".
Acabo de ver la edición que comentas. Un poquillo cara aunque pasaré por el aro. ¿Es exclusiva de Fnac?

Raúl Calvo dijo...

Sí que es exclusiva del Fnac. No la he visto en ningún otro lado y lleva el logo de la compañía en la portada, con lo cual parece bastante definitivo. En la web del Fnac la venden a 15,99, aunque depende de donde vivas puede variar el precio. Yo creo que pagué eso o algo menos, ahora no me acuerdo. En youtube he encontrado una entrevista a Zulueta incluida en la edición que sacó El País.

Dr. Gonzo dijo...

Esa edición en dos discos de la que hablas la he visto yo en el mediamarkt mas de una vez.

Con esta película me pasó como con Tidelan; ambas las quite a la mitad.
Tideland la quité porque me parecia estúpida y sin "gracia", y Arrebato porque no me estaba enterando de nada y no le veia mucho sentido al asunto.
Me recordó muchísimo al cine de David Lynch, pero este si que me gusta.
No obstante, le daré una segunda oportunidad cuando tenga los animos necesarios, a ver que tal.

ATTICUS dijo...

Me ha pasado igual que a Dr. Gonzo
la quite a los 40-45 min.,claro que yo tenia cuando la vi 16-17 años y todo ese embrollo no iba
conmigo .

Raúl Calvo dijo...

Dr. Gonzo y Atticus, no sé si es que estoy demasiado acostumbrado a ver películas bizarras como ésta pero no me pareció difícil de seguir ni extraña en ese sentido. No después de Jodorowsky o Gordon Lewis. Las películas de Lynch están muy bien diseñadas pero, como Tim Burton, es porque Lynch sabe muy bien de donde sacar sus ideas. Y, también como Burton, peca de estilo sobre sustancia.

Y yo pertenezco al exclusivo club de aquellos a los que les gustó Tideland. Somos pocos pero bien avenidos ;D

ATTICUS dijo...

Bueno Raul,yo tengo que decir que a mi Tideland,a pesar de ser una
mezcla de fantasia imaginativa como pocas,es realmente especial y
sabiendo de quien la relizo (Terry
Gilliam,autor de "12 monos",
"Brazil",no es dificil imaginar que iba a ser asi "rara",pero yo reconozco que tiene momentos de camara y efectos realmente geniales.

Raúl Calvo dijo...

Atticus, lo decía más por el comentario de Gonzo, pero está bien saber que no soy el único al que le gustó :)

Javier Simpson dijo...

Muy buena entrada, Raül. Sí que es una peli de culto. Debe tener su complejidad y debe ser de difícil digestión. Hace tiempo había visto una peli española (hablo de hace más de 10 años) en la que un hombre se cargaba a gente en un cine por detrás; era muy oscura y daba algo de grima. No la llegué a ver toda, pero me había impresionado. No sé si se trata de Arrebato, pero me da que sí. De todas formas la veré pronto. Un saludo, Raül.

Dr. Gonzo dijo...

Javi, tal y como describes esa película del asesino en el cine, me recuerda a Angustia, de Bigas Luna.

Javier Simpson dijo...

Ah, pues seguramente, Dr Gonzo. Gracias por tu aclaración. Me suena también esa. Un saludo

Raúl Calvo dijo...

Yo también creo que es Angustia, película que no me gustó mucho. En Sabe que estás sola también tenías un asesino en un cine, aunque era una peli americana.

Mustangcillo dijo...

La acabo de ver. Ahora mismo estoy completamente fascinado e impactado. Y me dan ganas de volver a verla...

Una vez más, gracias por la recomendación, Raül.

Raúl Calvo dijo...

De nada, hombre, me alegra que esta peli tenga un nuevo fan.