13 oct 2011

Jo, ¡qué noche! (After Hours)


Este martes pasado, aprovechando que el miércoles era fiesta, salí a cenar y de fiesta con un@s amig@s. De modo que ayer me pasé el día recuperándome, tirado en el sofá viendo documental tras documental tras documental de Star Wars (por fin terminé de ver todo el material extra del pack, ¡yupi!). Pero no voy a hablaros de la saga galáctica, como ya habréis deducico, sino del clásico de la comedia negra Jo, ¡qué noche! (After Hours, Martin Scorsese, 1985).

Salir de noche por Barcelona siempre me recuerda esta película, especialmente por la zona por la que habitualmente vamos. El Gótico es un barrio de callejuelas laberínticas donde te puedes encontrar locales de diversa índole y mucha gente extraña. Bares musicales heavys al lado de locales de música funky, power pop y música indie al lado de bares flamencos, la atmósfera (aunque más festiva) resulta reminiscente de la que aparece en el film de Scorsese. Una atmósfera que te indica que es un lugar en el que cualquier cosa puede pasar.

Tal vez por eso, la película de Scorsese me parece una genial comedia negra, que al mismo tiempo se hace bastante real a pesar de lo extremo de las situaciones que aparecen reflejadas en ella. Sobretodo porque la situación básica que inicia la trama es una en la que me he encontrado alguna vez. Ir con una chica guapa que acabas de conocer hasta un local gótico con esqueletos colgados de las paredes o una disco de ambiente con música kitsch porque tienes la esperanza de formar con esta chica una bestia de dos espaldas cruzándote con gente cada vez más extraña, ¿a quién no le ha pasado alguna vez?

El guion fue escrito por Joseph Minion como proyecto de fin de carrera. Pero cuando la película entró en producción se descubrió que parte del guion lo había plagiado Minion de un monólogo de Joe Frank titulado Lies. Esto provocó una denuncia por parte de Frank que acabó en un favorable acuerdo económico para él aunque no se le atribuye ningún mérito en los títulos de crédito. Aquí tenéis un enlace en el cual podéis escuchar el monólogo de Frank, que encontré en la página web Panopticist.com: Joe Frank's Lies.

Para los que no tengan ganas de escucharlo (aunque es muy bueno), os aclaro que las partes copiadas del monólogo son: un hombre conoce a una extraña pero atractiva mujer en una cafetería por la noche, la llamada nocturna que le hace el hombre a la mujer, el hombre pierde cinco dólares por la ventanilla del taxi y no puede pagar (el taxista en la película está interpretado por Larry Block, amigo y colaborador de Joe Frank), la compañera de piso artista que hace pisapapeles con forma de rosquilla y que sirve de excusa para la cita, que la mujer le abre la puerta vistiendo sólo una bata, la bata se abre lentamente mientras están sentados hablando, la mujer le cuenta una historia de un hombre que la violó entrando en su casa por la escalera de incendios y la historia del ex marido de la mujer. Las historias de Joe Frank, que emite en la radio pública americana, tienen el mismo tono oscuro de realismo pesadillesco mezclado con comedia de la película.

Dejando de lado este desagradable asunto, la película destaca por la grandiosa dirección de Martin Scorsese (¡y pensar que estuvo a punto de ser dirigida por Tim Burton!) que le añadió un demente toque paranoico al conjunto. Scorsese dirige la película como si fuera un film de suspense o terror, con elaborados movimientos de cámara (según IMDB, la intención de Scorsese era parodiar el estilo de Alfred Hitchcock, no sé si la intención real era esa pero Scorsese tiene costumbre en sus filmes de homenajear a sus directores favoritos -sólo tenéis que escuchar el comentario que hace en Taxi Driver (1976, aquí y aquí) y oír todas las referencias cinematográficas que incluyó- así que es posible que hiciera referencias a Hitchock ya fuera como inspiración o como parodia-). La banda sonora de Howard Shore enfatiza el estilo del director, siendo a un mismo tiempo inquietante y juguetona.

La estructura de la película recuerda a la de las comedias mudas de slapstick, en las cuales las patochadas e incidentes aumentan de aparatosidad hasta llegar a un apoteósico clímax. De la misma manera, la intensidad de la horrible y kafkiana noche del protagonista, un adecuado Griffin Dunne, aumenta exponencialmente. Finalmente, la conclusión de la película le da un toque circular, que siempre queda bien, y enfatiza la naturaleza perdedora de su protagonista.

De la larga y brillante filmografía de Scorsese, ésta es una de mis películas favoritas del director. Técnicamente, me fascina como construye cada plano y realiza cada movimiento de cámara; cada escena es brillante, gracias también a como las edita Thelma Schoonmaker, colaboradora habitual del director. A pesar de las partes plagiadas, el guion resulta también muy destacable, creando una divertida serie de catastróficas desdichas para disfrute del espectador.

10 comentarios:

Einer dijo...

No sé por qué pensaba que ya habías hablado de esta peli. Sólo diré lo que digo siempre que alguien comenta esta peli: "Ríndete, Dorothy". En fin, es lo que más me gusta de una película estupenda.

Dr. Gonzo dijo...

A mi esta película me agobia siempre que la veo jaja Como ya comenté en la entrada que le dediqué en mi blog, creo que el mayor acierto de ¡Jo, qué noche! es esa conseguidísima ambientación. Ese aire casi onírico que se respira durante toda la película, como si el protagonista estuviese atrapado en un laberíntico sueño del que no puede escapar.

Otra cosa a la que me recuerda poderósamente esta película es a las aventuras gráficas de Lucas Arts (Grim Fandango, Monkey Island...), ya que funcionan igual que el filme:
-Conoces personajes cada vez más raros
-Hablas con dichos personajes
-Estos te dan un objeto
-El objeto, tarde o temprano, te servirá más adelante.

De hecho, cuando vi por primera vez la película, pensé en lo interesante que sería hacer un videojuego basado en ella, lleno de pistas, personajes y objetos con los que interactuar.
También sentí unas ganas terribles de levantarme de la cama, vestirme e irme a la calle a altas horas de la noche, a vivir aventuras urbanas igual que el pobre protagonista.

Raúl Calvo dijo...

¿ningún comentario sobre el plagio?

Javier Simpson dijo...

A mí también me encanta la peli, de las mejores de Scorsese. La noche da mucho juego en cuanto a sensaciones y la atmósfera que la envuelve, y la fauna urbana que la vive también.
Por cierto, Raül, de lo que más me acuerdo cuando estuve en Barcelona con un amigo fue de esos bares de la zona gótica, algunos bastante ways y para todos los gustos, y esas callejuelas estrechas que le daban a la zona un aire especial; es cierto, en un lugar como éste se podía vivir una historia similar a la de After hours.
Buena entrada.

Dr. Gonzo dijo...

El tema del plagio (no me he molestado en escuchar el monólogo porque no me iba a enterar de nada) me da igual, la verdad. Creo que esta película tiene aspectos mucho más interesantes que comentar, y a fin de cuentas, lo importante es el sobresaliente resultado final.
PD: del monólogo no he entendido ni papa, por lo tanto para mi es como si no existiese jaja

Raúl Calvo dijo...

Javi, de todas maneras ¡espero no encontrarme nunca en la misma situación por mucho que me guste el barrio gótico! ja, ja

Dr. Gonzo, me pregunto si dirías lo mismo si la película no te hubiese gustado. Creo que es importante mencionarlo ya que, dejando de lado el aspecto técnico del maestro Scorsese, el tono y la atmósfera, así como las situaciones que vemos en la película derivan de este monólogo. Si el guionista no lo hubiese copiado no existiría la película.

Lillu dijo...

Hombre, yo creo que por muy bueno que fuera el monólogo si no lo hubieran sabido adaptar bien pues la película sería más bien flojita. Hay innumerables ejemplos de películas con historias más que decentes que terminan convirtiéndose en rollos aburridísimos por la manera de enfocar la historia, o de presentarla o por una mala dirección. Aquí la mano de Scorsese es una garantía (al menos su mano en aquella época XD) y para mí también es una de mis favoritas de él, siempre después de "Taxi Driver" y "Toro Salvaje" :)

Leí en algún lado que la película no tenía demasiadas pretensiones cuando se estrenó, pero con los años creo que se ha convertido en un esperpento cinematográfico muy logrado y recordado.

saluditos

Raúl Calvo dijo...

Lillu, el problema no es que fuera una adaptación, sino un plagio. El guionista utilizó todo el monólogo (menos el final, claro) para hacer su guion sin acreditar en ningún momento al autor del monólogo o que lo había sacado de ahí. Y la "influencia" se nota en los guiones que hizo después de esta película. Pero, por suerte Scorsese es un maestro, aunque a mí me gusta más ésta que Toro Salvaje :D

Mustangcillo dijo...

La acabo de ver. La verdad es que me ha parecido una película bastante curiosa. Creo que a todos nos ha pasado eso de salir de noche con una chica a la que apenas conocemos y acabar rodeados de gente de lo más extraña y peculiar, jajaja.

Raúl Calvo dijo...

Sí, aunque aquí se lleva a un extremo pesadillesco es una situación en la que todos nos hemos encontrado todavía hoy! Es que no aprendemos.